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Tenemos una responsabilidad con las generaciones venideras: Rueda de prensa de LOS AMANTES SE DESPIDEN CON LA MIRADA

Durante el 23er Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), se llevó a cabo la rueda de prensa de la nueva película de Rigoberto Perezcano, Los amantes se despiden con la mirada. Esta cinta marca el cuarto regreso al festival del director oaxaqueño, quien ya fue galardonado con el premio a Mejor Mediometraje Documental en el 1er FICM y el Mejor Largometraje Mexicano en la 12a edición del FICM.

Junto al director, estuvieron presentes Cristina Velasco, productora; las actrices Ximena Figueroa y Sonia Couoh, y los actores Pedro Miguel Javier, Guillermo Nava, Ariel Galván y Marco Dzul.

"Lo que vieron es una película que ha sido un proceso muy largo, muy bello y muy sofocante, porque empezamos a filmar el lunes 24 de febrero del 2020, año en que empezó la pandemia," introdujo Rigoberto Perezcano. Esta pausa forzada permitió al director madurar la idea que hoy presenta en el FICM.

La productora, Cristina Velasco, agradeció a la prensa por su presencia. Reconoció la importancia que tienen los medios para que el tema que aborda Los amantes se despiden con la mirada sean puestos sobre la mesa.

Un pensamiento se mantuvo firme desde el principio del proyecto: su rechazo por los hábitos y dinámicas que violentan los derechos de las mujeres menores de edad para elegir libremente sobre su vida. “Mientras se utilice la palabra tradición o usos y costumbres cuando se estén violando los derechos de niñas y niños, yo voy a estar en contra”, aclaró.

“La escucha abierta y positiva de Rigo hacia los comentarios que tenían las mujeres de su equipo dio este resultado”, comentó la actriz Sonia Couoh respecto a la confianza que existía para contribuir al proyecto.

Couoh también reconoció la labor del cinefotógrafo, Juan Pablo Ramírez, para representar una situación tan cruda de una forma poética y transparente, libre de juicio.

Velasco complementó la respuesta, señalando que el acierto que permite esta sensación en la película es que no hay personajes buenos o malos, solo hay personajes atrapados en sus circunstancias. Ximena Figueroa, actriz novel, coincidió al indicar que la intención del proyecto no es señalar ni juzgar los sucesos como malos, sino que el público observe el tipo de vida que llevan y cuestione qué se puede hacer mejor.

Siguiendo el mismo hilo, el actor Ariel Galván opinó que, además de haber participado en el proyecto, su labor radica en cómo moldea sus propios principios y en su responsabilidad con las generaciones venideras. "Podemos ser padres, madres, hijos, hermanos. Desde cualquier trinchera podemos criar generaciones que respeten y amen a las mujeres", añadió.

Guillermo Nava reflexionó sobre el tema central de la película, señalando que la violencia más delicada es aquella a la que nos hemos acostumbrado tanto que ya no logramos ver. Este entendimiento fue crucial para el actor, quien vivió una profunda maduración durante la producción: antes del rodaje no era padre, pero al tener una hija se sintió más conectado con la historia.

Nava comentó que el mayor desafío con su personaje fue “no juzgarlo, porque hace algo que de entrada es difícil no juzgar”, y así poder “entender el dolor que vive, cómo se fue envolviendo en esta normalidad y violencia”.

Rigoberto Perezcano confesó que la verdadera intención con Los amantes se despiden con la mirada es proyectarla en todas aquellas comunidades donde esta práctica aún se considera una tradición. “La necesidad natural de la película misma es que llegue ahí y se proyecte. Que la vean niñas, niños, hombres y mujeres mayores”, detalló.

Respecto al elenco y la diversidad generacional, el director explicó su decisión de trabajar con no actores, especialmente jóvenes, ya que disfruta observar cómo conviven y aprenden de quienes sí tienen formación profesional y experiencia.

Sobre su futuro, Perezcano expresó su gusto por filmar en Oaxaca, aunque también siente la necesidad de explorar historias en otros lugares. “Quiero otros riesgos, quiero hacer otras películas, pelis que me cuestionen, que me generen retos artísticos”, finalizó.

Los amantes se despiden con la mirada relata la historia de Elida, una joven de 16 años forzada, por usos y costumbres, a un matrimonio arreglado con Damián, un hombre mayor y altivo. Sin embargo, ella rechaza estas viejas dinámicas debido al amor que profesa a Olivo, un joven que no deja de invocar a su padre fallecido.